En LIC nos gustan los retos, por lo que año tras año hemos ampliado nuestro campo de acción, tanto en el ámbito geográfico como en el desarrollo de nuestra capacidad constructora.
La participación en proyectos cada vez más exigentes y de mayor complejidad técnica, implica la incorporación de nuevas tecnologías y maquinaria que nos permitan un mayor control del proceso productivo.
La incorporación de estas tecnologías específicas, nos permiten una gestión integral de los procesos de obra y nos aportan una gran ventaja competitiva, con especial relevancia en el entorno internacional.